sábado, 1 de octubre de 2016

LA RUNA MULA : MULA DEL DIABLO


“Ahora toca hablar sobre un mito que por siglos y siglos, desde la llegada de los colonizadores, quienes trajeron con ellos la religión y con ella a los misioneros a las vastas regiones amazónicas, se han ido pasando de boca en boca, de padres a hijos, para instruir y advertir que el pecado de la carne puede traer consecuencias muy colosales para aquellos que han decidido llevar un amor clandestino, un amorío prohibido en el cual el diablo se involucra y como regodeándose con la situación, juega a su antojo con los protagonistas infieles, como si fueran sus títeres, víctimas de la maldición que les ha impuesto.” (Fragmento de la Selva de los Tunches)
La Runamula, es el adulterio encarnado en mito, ya que su procedencia nace de la infidelidad de una mujer casada con un amante, del incesto de un padre con una hija, o de la unión a escondidas de un cura con una feligresa. Son estos amores prohibidos y retorcidos los que castigan a la infiel y al amante convirtiéndolos (a ella) en una mula que, en las noches de los martes y viernes en donde la luna llena ilumina la tenebrosa oscuridad, está condenada a trotar enloquecidamente por la comunidad cabalgada por su amante que ha sido convertido en un amorfo demonio. La Runamula, cuya denominación quiere decir: "mujer mula", y en una expresión más coloquial “La mula del diablo” ha sido unos de los mitos más avistados en muchas comunidades de la Amazonía peruana, tanto de la selva baja, ceja de montaña y selva alta, sumando así la indiscutible credibilidad de su existencia.
Muchos definen a esta criatura como un ser híbrido: mitad mujer y mitad mula (algo asi como un centauro), otros juran que es una mula blanca que suele recorrer despavorida a través la comunidad en plena madrugada, pero la mayoría de testigos coinciden en que esta criatura endemoniada se muestra como una mula negra de crin erizada que cuando se manifiesta lo hace de la manera más terrorífica: sacudiéndose como una bestia rabiosa y maniática, dando feroces dentelladas al aire, botando espuma por el hocico y mostrando unos ojos rojos como el fuego.
Muchas veces, los pobladores que saben que una Runamula deambula por la comunidad creando caos y terror, deben vencer el miedo, ponerse de acuerdo y hacer guardia en grupos madrugadas enteras con el fin de acorralar en una noche de luna llena a este ser endemoniado y darle la paliza merecida para saber al día siguiente (cuando ya la transformación ha terminado y los moretones aparecen en la piel de la infiel) quien es la amante que ha estado conmocionando con sus trotes y rebuznos terroríficos a toda la comunidad.
Carlos Velásquez Sánchez


1 comentario:

  1. Tiempo atras escuche la historia de la Runa Mula cuando estuve de viaje por Lamas. Fue un gusto leer tu historia y recordar esta leyenda. Felicitaciones por tu blog.

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